Cómo el alcohol y la hipoglucemia controlan el cuerpo, la mente y el espíritu. Parte II
Se puede corregir la hipoglucemia y los antojos físicos
del alcohol a través de la dieta. La mejor dieta para alcohólicos, diabéticos e
hipoglucémicos es una dieta de granos enteros. ¡Deseche todos los productos
alimenticios refinados de los armarios de su cocina y vuélvase natural! Los
alimentos como el pan de trigo integral, arroz integral, pasta de granos
enteros, frijoles, legumbres y avena funcionan para estabilizar y metabolizar
los niveles de azúcar en la sangre, lo que le da al páncreas sobrecargado un
descanso para que pueda comenzar a hacer su trabajo correctamente.
Los granos enteros son mejores porque se digieren
lentamente en el sistema del cuerpo, lo que resulta en un ambiente óptimo para
los niveles de azúcar en la sangre: no hay adiciones, antojos ni desequilibrios
emocionales y físicos. La dieta juega un papel muy importante en la forma en
que funciona nuestro cerebro. Con una dieta de granos enteros y alimentos
integrales, el cerebro deja de enviar señales de más alcohol o azúcar.
Para resumir, el alcoholismo podría ser un síntoma de
hipoglucemia. No todas las personas que tienen niveles bajos de azúcar en la
sangre se vuelven alcohólicos, principalmente porque el resto de los
desencadenantes del alcoholismo no están presentes en ese individuo.
Adicción psicológica al alcohol
Ahora llegamos a los aspectos emocionales y mentales del
alcoholismo. Los alcohólicos generalmente tienen altibajos emocionales, se
agitan fácilmente, sufren de ansiedad y pánico, tienen una baja autoestima y, a
menudo, se sienten deprimidos. Estos síntomas se deben a que tienen
hipoglucemia. La hipoglucemia es tanto una aflicción emocional como física.
Todos los anteriores son síntomas de hipoglucemia o síndrome de sobrecarga de
azúcar.
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